TCP

Propulsado por Gas Natural Licuado (GNL), el CMA CGM Bahia manipuló más de 1.000 TEUs durante su paso por Paranaguá.

El jueves 25, la empresa que gestiona la Terminal de Contenedores de Paranaguá (TCP) dio la bienvenida al portacontenedores CMA CGM Bahia, el primer buque biocombustible que atraca en la terminal. Propulsado por Gas Natural Licuado (GNL), el buque de la armadora francesa CMA CGM tiene 336 metros de eslora, 51 metros de manga y capacidad para transportar 13.200 TEUs (contenedores de 20 pies de longitud). En la operación en TCP se manipularon aproximadamente 1.380 TEU.

Construido en 2023, el CMA CGM Bahía es un hito para la industria naviera, gracias a sus tecnologías que garantizan una operación más sostenible, como el sistema de recirculación de gases de escape (ICER), que reduce las emisiones de metano y reduce las emisiones totales de gases de efecto invernadero en más de un 28%.

«La operación de un buque como éste en la terminal está en línea con los objetivos de TCP y de toda la industria naviera de reducir las emisiones de dióxido de carbono, promoviendo una mayor eficiencia energética en sus operaciones marítimas, además de atender una demanda cada vez más importante para el mercado y para nuestros clientes», afirmó la gerente comercial de TCP para armadores, Carolina Brown.

El portacontenedores zarpó de TCP rumbo a Santos en la madrugada del viernes 26. El destino final de la ruta de CMA CGM Bahia es el continente asiático.

Inversión en electrificación

En 2023, la Terminal de Contenedores de Paranaguá adquirió su primer autobús eléctrico, utilizado para transportar a sus empleados a sus puestos de trabajo en el patio de 480.000 metros cuadrados de la terminal. El vehículo modelo D9W, de la marca china BYD, tiene capacidad para 80 pasajeros, es totalmente silencioso, cuenta con sistema de frenado regenerativo y garantiza cero emisiones contaminantes.

Ese mismo año, TCP completó la conversión de dos grúas RTG utilizadas en las operaciones ferroviarias de la terminal, promoviendo una reducción del 95% de las emisiones de CO2 en el funcionamiento de cada equipo y reduciendo el coste de mantenimiento de los equipos en un 90%.

Isabelle Veloso Sousa