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Procedimiento reduce drásticamente el tiempo de despacho de la carga para los importadores

En enero de 2024, la empresa que administra la Terminal de Contenedores de Paranaguá (TCP) pasó a ofrecer el servicio de destrucción de madera condenada. El proceso aporta mayor agilidad a los transitarios e importadores, reduciendo radicalmente el tiempo de liberación de las cargas retenidas por utilizar soportes y embalajes de madera no certificada con el sello de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF).

Este sello, que se verifica durante la inspección de la carga realizada por auditores del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento (MAPA), certifica que la madera ha sido sometida a un tratamiento fitosanitario adecuado, evitando el riesgo ambiental y económico derivado de la propagación de plagas procedentes de otros países.

«La terminal trabaja constantemente para ofrecer nuevas soluciones, y la integración de la destrucción de la madera en la cartera de servicios redunda en una mayor eficacia para nuestros clientes, que ahora pueden regularizar la situación de su carga con mayor rapidez y menos burocracia», afirma el director comercial, logístico y de atención al cliente de TCP, Giovanni Guidolim.

El procedimiento de destrucción, llevado a cabo en una zona reservada de la terminal por la empresa Paddo Ambiental, se realiza con equipos móviles homologados por el MAPA y consiste en triturar palés, cajas y soportes de madera, generando un residuo con un grosor inferior a 6 milímetros. Diego Toffoli, socio-director de la empresa, destaca que «el servicio prestado por TCP es un diferenciador importante, ya que algunos puertos y terminales no cuentan con empresas registradas para realizar esta operación».

Sin el servicio de destrucción de madera, los importadores tendrían que tramitar la reexportación de los embalajes y soportes condenados al país de origen del producto o solicitar una orden judicial que permita retirar el material de la zona primaria para que sea incinerado por una empresa autorizada por el MAPA. Además de ser costosos, ambos procesos podían llevar semanas o incluso meses, durante los cuales la carga quedaría retenida.

«Es una gran noticia para quienes se dedican al comercio exterior y operan a través de TCP, especialmente para los transitarios. La destrucción de la madera permite cumplir todas las medidas de seguridad exigidas por las autoridades aduaneras en el menor tiempo posible», afirma Flavio Demetrio da Silva, presidente del Sindicato de Agentes de Aduanas de los estados de Paraná y Santa Catarina.

Flavio también destaca que la oferta de este servicio ha atendido una demanda que la categoría había planteado en reuniones con el equipo de la Terminal. «La atención prestada por TCP a los usuarios se refleja en la disponibilidad de esta novedad, que representa una gran diferencia en comparación con otras terminales de la región sur», concluye.

TCP inaugura un Centro de Residuos

Con el objetivo de enviar el 100% de los residuos contaminados a reciclaje, tratamiento o reutilización, TCP inauguró en enero su nuevo Centro de Residuos. Con un área de 120 metros cuadrados y capacidad para almacenar 42 IBCs (Intermediate Bulk Containers), la estructura está preparada para separar cada tipo de residuo, ya sea líquido, sólido, químico, contaminante, peligroso, incompatible, entre otros.

Además de proteger la salud de los empleados, el proyecto responde a los objetivos de la terminal de preservar el ecosistema en torno a su zona de operaciones, cuidando del medio ambiente y del bienestar de las comunidades cercanas.

Isabelle Veloso Sousa